Lo más que me gustó de Costa Rica fue su clima. Yo soy climática, me importa mucho el clima del país. La temperatura era de 60 grados aproximados. Caminabas, caminabas y no te cansabas. En las noches debías usar un abrigo liviano, pero no sufrías frío. A veces caía una lluvia tan fina que no te mojaba prácticamente, era una delicia salir a pasear caminando. El único inconveniente era cruzar las calles, era todo un reto, debías cruzar corriendo si no querías morir XD el tráfico me recuerda mucho el juego de frogger. Un recuerdo grato que nos impresionó es que íbamos caminando tomados de la mano por la calle callados y un hombre nos detuvo para ofrecernos una canción: En mi Viejo San Juan, como supo? Íbamos en silencio, todos dicen que se nos ve la mancha de plátano, para nosotros es imperceptible. En Costa Rica visitamos los volcanes, los lagos, una hermosa tierra. Las personas muy amables y hospitalarias. Ellos son mestizos como nosotros pero puedes encontrar indígenas procedentes de otras tierras que vienen a comercializar sus artesanías. Los desayunos de los ticos para reyes: desde arroz con frijoles, carne frita, amarillos fritos, tortillas, panes, dulces de reposterias, jugos y cafés. Una comida era suficiente para las aventuras del día. La artesanía más común en Costa Rica es una carreta decorada en múltiples colores, preciosa. Y la frase distintiva de los ticos: Pura Vida. Fuimos a un show típico muy hermoso, una noche mágica. Tanto me gustó Costa Rica que quería quedarme a vivir allá. Dejamos los rápidos como asignatura pendiente.
En esta oportunidad quiero compartirles lo que he ido aprendiendo de mi experiencia planificando mis viajes.
miércoles, 21 de noviembre de 2012
Costa Rica
Lo más que me gustó de Costa Rica fue su clima. Yo soy climática, me importa mucho el clima del país. La temperatura era de 60 grados aproximados. Caminabas, caminabas y no te cansabas. En las noches debías usar un abrigo liviano, pero no sufrías frío. A veces caía una lluvia tan fina que no te mojaba prácticamente, era una delicia salir a pasear caminando. El único inconveniente era cruzar las calles, era todo un reto, debías cruzar corriendo si no querías morir XD el tráfico me recuerda mucho el juego de frogger. Un recuerdo grato que nos impresionó es que íbamos caminando tomados de la mano por la calle callados y un hombre nos detuvo para ofrecernos una canción: En mi Viejo San Juan, como supo? Íbamos en silencio, todos dicen que se nos ve la mancha de plátano, para nosotros es imperceptible. En Costa Rica visitamos los volcanes, los lagos, una hermosa tierra. Las personas muy amables y hospitalarias. Ellos son mestizos como nosotros pero puedes encontrar indígenas procedentes de otras tierras que vienen a comercializar sus artesanías. Los desayunos de los ticos para reyes: desde arroz con frijoles, carne frita, amarillos fritos, tortillas, panes, dulces de reposterias, jugos y cafés. Una comida era suficiente para las aventuras del día. La artesanía más común en Costa Rica es una carreta decorada en múltiples colores, preciosa. Y la frase distintiva de los ticos: Pura Vida. Fuimos a un show típico muy hermoso, una noche mágica. Tanto me gustó Costa Rica que quería quedarme a vivir allá. Dejamos los rápidos como asignatura pendiente.
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Este es mi lugar favorito en todo el mundo, claro aunque Puerto Rico es mi patria. Sus desayunos son como tu bien dices, de rey. Si yo viviria alli.
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